Cuatlalpan: en las tierras del águila.

Cuatlalpan: en las tierras del águila.

Pueblo comalero.

Es un compendio de relatos muy similar al documento de Memorias de mis abuelos de Chimalhuacán.  Son relatos obtenidos de la fuente viva de este pueblo texcocano.

De la misma manera esta soportado por una nutrida bibliografía y documentos históricos así como fotografías proporcionadas por los mismos abuelos entrevistados.

 Cuautlalpan Texcoco baso su alimentación en la producción agrícola y según sus costumbres otorgan un nombre a sus cementeras o parcelas de acuerdo a la ubicación y calidad del suelo, dada esta por la cercanía de los manantiales y mamaderos del lago de Texcoco, así entonces, fueron llamadas las tierras má altas, las tierras para sacerdotes y señores de Tenochtitlan.

Códice Quinatzin

En el año de 1437. Las tierras del águila (Cuautlalpan) salvan de la hambruna a la ciudad de Tenochtitlan.

Según el censo rescatado de la Amoxtlatiloyan (biblioteca donde se guardaba el censo del tributo en la gran Tenochtitlan) tenía para entonces un grueso de población de 18,000 a 20,00 habitantes.

Se contaban 60,000 almas caminando diariamente en el mercado de Tlatelolco.

Las rutas transitadas desde esta época y hasta la colonia para el comercio entre los pueblos  están registradas de Veracruz- Morelos- Mexico (Mizquititlan- Cuaunahuac – Tenochtitlan) y Michoacán- Jalisco- México ( Michuacan-  Jalisco- Tenochtitlan)

En el año de 1800 estas rutas muy conocidas y transitadas las usaron los últimos comaleros de las tierras del águila para mercar su producto.

Con el tiempo, la segunda guerra mundial trajo la novedad del acero y el peltre para cocinar y todo cambio. En 1976 don Pablo Mendoza. Tercera generación de comaleros elaboro su última tandada de comales a la edad de 86 años.

Para estas fechas, y hasta el año de 1940 el racho La Noria de Luis Rodríguez Banda  abastecía de pulque a San Vicente Chicoloapan, Chimalhuacán Atenco y la incipiente Cudad Nezahualcóyotl. Así como el estado de hidalgo y Querétaro.

Precisamente la finca del mencionado rancho cuenta con un mosaico turco original en sus pisos.. Justo por esas fechas( 1906) el Sr Rafael Ortiz de la Huerta. Por órdenes del presidente, el general Don Porfirio Díaz manda a construir el palacio de minería en la Ciudad de México. El cual no tiene un mosaico turco como se pensó por un momento

En su lugar pusieron lienzos y columnas de mármol blanco porque no alcanzo el dinero para traer el mosaico turco.

Estos solo algunos datos que podrá encontrar en este maravilloso documento el cual está hecho con el mismo amor y esmero que Memorias de mis abuelos de Chimalhuacán.

Hay más. Pero por el momento los dejamos con este buen sabor de boca.

María Julieta Galvez

María Julieta Galvez

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