Dinero, moneda, billete
Por Elías Diégues.
Dinero, palabra heredera de denarius, moneda de plata, de uso corriente entre los romanos antiguos, su circulación alcanzó los seis siglos, no estuvo a salvo de los latigazos de la devaluaciones.
Ni el Imperio, tampoco la República romana escaparon de las lacerantes devaluaciones; dicho flagelo, luego de dos milenios, sigue azotando a todas las monedas del mundo; sacrifica, principalmente, a las personas más pobres, quienes ven caer las cenizas del valor de sus escasas monedas y pulverizarse el poder adquisitivo junto a la combustión de su esperanza.
Denarius, significa ‘que contiene diez’, la moneda de plata, valía diez ases -de aes, derivado de assun, que significa ‘asado’-, en una de las caras aparecía acuñada la letra ‘X’. A la letra “X’ el tiempo y las devaluaciones, ya mencionadas, le agregaron las letras ‘V’ e ‘I’ mayúsculas, representando ‘XVI’, es decir 16 ases.
La moneda y el billete por antonomasia es dinero. Moneda es heredera del apodo que Livio Andrónico dio a la diosa Juno, moneta. Moneta significa la que avisa.
<<La voz billete procede del francés ‘billet’ [biye], forma masculina de ‘billete’, diminutivo de ‘bulle’, que en latín medieval (‘bulla’) significaba ‘sello’ o acta con sello. La bula pontificia con su sello de plomo. Recuerda el origen de la palabra. Más tarde, correspondió a ‘esquela amorosa’ (‘billet doux’) y en el siglo XVI apareció el ‘billete’ como medio de pago>>.
La fascinante historia de las palabras, Ricardo Soca
Las comillas son mis <<testigas>> de que no quiero robar la autoría literaria. Sé que no escribir el nombre de la fuente es un grave error, me disculpo.
